El mundo, la política, las democracias y las finanzas están dominados por una hidra mundial compuesta por 28 grandes bancos internacionales cuyas políticas fijan el curso no sólo de las finanzas sino, también, de las democracias parlamentarias.
Walter Goobar
El mundo, la política, las democracias y las finanzas están dominados por una hidra mundial compuesta por 28 grandes bancos internacionales cuyas políticas fijan el curso no sólo de las finanzas sino, también, de las democracias parlamentarias.
Este es el argumento presentado por el economista francés François Morin en el libro de investigación que acaba de aparecer en Francia: La Hidra Mundial, el Oligopolio Bancario (Lux Editeur). El economista concedió una entrevista al colega Eduardo Febbro, corresponsal en Francia de Página 12, y en esa nota imperdible examinó quiénes son los que están dominando hoy día el mundo.
“La hidra mundial” es un conglomerado de 28 bancos coordinados entre sí –“interconectados”– que manejan el mercado cambiario, las tasas de interés, crean los productos tóxicos por los cuales luego pagan los Estados, o sea, los ciudadanos, influyen en las políticas económicas y modelan las democracias a su antojo.
El libro de Morin –también autor de Un mundo sin Wall Street– revela datos bancarios inéditos sobre el poder de esta hidra globalizada cuya potencia, por primera vez en la historia, dio vuelta la relación de fuerzas entre lo público y lo privado. Maniobras fraudulentas, pactos secretos, lobby contra la democracia, manipulación de los mercados, estos bancos “sistémicos” desempeñan un papel nefasto en las sociedades del mundo al tiempo que han hecho de la democracia un rehén de sus intereses privados.
Un dato basta para medir sus brazos: estos 28 bancos detentan recursos superiores a los de la deuda pública de 200 Estados del planeta. Las investigaciones llevadas a cabo en 2012 demostraron, en parte, los meandros de sus maniobras secretas.
Entre los 28 bancos del oligopolio, hay 14 que “producen” los productos derivados tóxicos cuyo valor alcanza los 710.000 millones de dólares, o sea, el equivalente a diez veces el Producto Bruto Interno mundial.
El autor insiste en que en el horizonte, se van formando las figuras del rompecabezas de un nuevo cataclismo. La hidra bancaria se ha transformado en un oligopolio vandálico para la economía mundial y la estabilidad de las sociedades.
Morin sostiene que “este oligopolio comenzó a emerger a mediados de los años ’90. Fue la liberalización completa del mercado de capitales lo que permitió la creación de vastos mercados monetarios y financieros a escala planetaria. Esta liberalización completa del mercado de capitales interviene luego de dos liberalizaciones precedentes en los años ’70: la del mercado cambiario y la de las tasas de interés.
El oligopolio se crea entonces cuando estos tres procesos llegan a su término. Entonces podemos decir que a partir de 1995, hay bancos que se tornan sistémicos a escala mundial, es decir, que la caída de uno de ellos puede provocar un cataclismo financiero mundial.
Otro dato no menor es la manipulación cambiaria. “El mercado cambiario es uno de los más grandes del mundo porque hoy hay 6.000 millones de dólares que se cambian cada día. En 2012 se descubrió que cinco bancos controlaban el 51 por ciento de ese mercado. Pero también manejan el mercado de las tasas de interés a corto plazo y el mercado de ciertos productos derivados.
Miradas al Sur
06-SEPT-2015