Polémico documental en Telefé

La religión y la ciencia buscan vida extraterrestre

Este miércoles a las 23 por Telefé se emitirá El ojo de Dios, un documental realizado por Magdalena Ruiz Guiñazú, Walter Goobar y Silvina Diflorio, que muestra otra forma de diálogo entre la ciencia y la religión que comenzó hacia mediados de los 90.

La Iglesia decidió ir en busca de la primicia en materia del conocimiento científico. En un proyecto conjunto con la Universidad de Arizona, el Papa encargó la puesta en marcha de un observatorio astronómico para financiar las investigaciones relacionadas con la existencia de vida extraterrestre.
La gran novedad es la inversión de fondos de la Iglesia para investigar lo que, a lo largo de la historia de la humanidad, condenó. La revolución de Copérnico hacia el siglo XIV, fue condenada por la Iglesia. Casi un siglo más tarde, Galileo fue obligado a retractarse por la Inquisición.
La idea del documental surgió a partir del descubrimiento de una importante suma de dinero que invertía la Iglesia Católica en la Universidad de Arizona. Los tres investigadores comenzaron a contactarse con distintas personalidades del centro científico para tomar conocimiento y testimonios sobre el novedoso proyecto.
La búsqueda se estableció, también, con el contexto que rodea al observatorio y se tomaron declaraciones de ecologistas y aborígenes en contra de llevar a cabo el proyecto en su territorio.
Varios interrogantes pueden quedar planteados este miércoles cuando salga al aire El ojo de Dios y se haga público el proyecto denominado Vatican Advance Observatory.
Los interrogantes están vinculados a las nuevas formas de relación entre ciencia y religión, a la necesidad de la Iglesia Católica de ponerse a la vanguardia de las últimas investigaciones científicas, al beneficio de invertir en un proyecto de carácter opuesto al conocido pensamiento religioso y a la cuestión acerca de un nuevo camino en la mirada de la Iglesia.
Este miércoles a las 23, con conducción de Magdalena Ruiz Guiñazú, por Telefé.
TERRA - Buenos Aires, 22 de noviembre de 2000