La Conferencia de Interpol resolvió ponerle el alerta roja a las órdenes de captura de cinco iraníes reclamados por la justicia Argentina por la voladura de la AMIA. A partir de cómo Teherán ha actuado en casos similares es difícil imaginar que los iraníes se van a quedar cruzados de brazos. En general responden con medidas simétricas
Por Walter Goobar
La Asamblea General de Interpol resolvió este miércoles ponerle el alerta roja a las órdenes de captura de cinco iraníes reclamados por el fiscal Alberto Nisman y el juez Rodolfo Canicoba Corral por su vinculación con el atentado contra la AMIA. Si bien Interpol no evalúa las pruebas, los 78 votos a favor del pedido argentino son un aval para la pesquisa y un duro revés para aquellos que argumentan que las pruebas contra Irán son parte de una campaña internacional orquestada por EEUU e Israel.
La justicia de Alemania, Francia, Suecia y Suiza tiene contundentes evidencias de que durante gran parte de los ´90 Irán perpetró actos de terrorismo de Estado cuyas matrices son casi idénticas a los atentados perpetrados en la Argentina. Más aún, en algunos de esos casos que terminaron en severas condenas, los inculpados fueron los mismos funcionarios cuya captura acaba de avalar Interpol.
Parte de esa discusión se reflejó en la votación del miércoles en la que hobo 14 votos en contra y 26 abstenciones. Venezuela, por ejemplo, estuvo ausente, porque de lo contrario iba a votar con Irán. Nicaragua votó con Irán, mientras que Ecuador apoyó la postura argentina.
Brasil también asumió una posición sugestiva: se abstuvon en la votación, para no convalidar las sospechas que existen sobre la Triple Frontera. Lo cierto es que el atentado -según el fiscal Alberto Nisman -, fue coordinado desde un celular ubicado en la Triple Frontera y comprado por un sujeto llamado André Márquez.
Ese teléfono recibió llamados entre el 1 y el 17 de julio. Nunca antes y nunca después. El primer llamado del 1 de julio es desde Ezeiza y el último se hizo desde Aeroparque el 18 de julio dos horas antes de la explosión.
La investigación de Nisman asegura que el atentado se decidió el 14 de agosto de 1993 en la ciudad de Mashad y el historial de los iraníes y el libanés involucrados en esta causa habla por si mismo. Por ejemplo, las fichas migratorias de Moshen Rabbani, y Ahmad Reza Ashgari confirman que ambos estaban en Irán en la época en que se decidió el atentado..
- Mohsen Rabbani: Fue consejero cultural de la embajada de Irán en Buenos Aires desde el 3 de marzo de 1994 hasta el 19 de mayo de 1998. A Rabbani, se le atribuye responsabilidad en el ataque sobre la base de un entrecruzamiento de llamadas con el teléfono de André Marquez y algunos domicilios en El Líbano, supuestamente de dirigentes de Hezbollah.
A Rabbani no sólo se lo vio recorriendo concesionarias en la avenida Juan B. Justo para comprar una Traffic similar a la usada en la voladura de la AMIA, sino que también abrió una cuenta en el Deustche Bank cuando vuelve de la reunión de Meshad donde supuestamente se decide el ataque y se cierra dos meses después del atentado. En un período muy corto pasaron por esa cuenta 150 mil dólares, que es una cifra mayor que la de todas las cuentas de la Embajada de Irán. Los días previos al atentado, el 4 y el 11 de agosto se retiran 90 mil dólares en efectivo.
- Ahmad Reza Ashgari: También conocido como Mohsen Randjbaran. Diplomático iraní, acreditado en la Argentina como tercer secretario de la embajada de su país entre el 11 de julio de 1991 y el 8 de julio de 1994.
Ashgari o la República de Irán deberían responder porqué este funcionario abandonó la Argentina diez días antes del atentado y seis días después del embajador Hadi Spoleimanpour. El día anterior al atentado, también abandonarían sus destinos los embajadores de Irán en Chile y en Uruguay, quienes embarcaron en el mismo vuelo con destino a la ciudad alemana de Frankfurt.
Por otra parte, el tráfico telefónico al celular de Máequez se incrementa el 8 de julio que es cuando Ashgari abandona sorpresivamente el país, a pesar de que su misión concluía en octubre.
- Alí Fallahiyan: Desde 1988 fecha en que se hizo cargo de la jefatura de los servicios de inteligencia iraníes (VEVAK), Ali Fallahiyan, fue responsable de dos docenas de atentados cometidos contra disidentes políticos en distintas partes del mundo. En septiembre de 1992 un tribunal berlinés estableció la responsabilidad del entoncesjefe del Estado Ali Akbar Rafsanjani, el máximo líder religioso Ali Jameini y el jefe de los servicios secretos Ali Falahiyan en el asesinato del opositor Kazem Darabi. Por esa causa,
Fallahiyan ya estuvo en la lista de los más buscados por Interpol al igual que el jefe de operaciones de Hezbollah, Imad Fayez Mughniyeh.
Ahora que cinco de sus ciudadanos y un libanés ingresaron a la lista de los hombres más buscados, la República Islámica de Irán tiene dos alternativas: cumplir con el mandato de la comunidad internacional y poner a disposición de la justicia argentina a los acusados, o convertirse en un país que ampara y protege a terroristas internacionales.
A partir de cómo han actuado en casos similares es difícil dificil imaginar que se van a quedar cruzados de brazos. En general responden con medidas siméticas como podría ser dictar una orden de captura contra el fiscal Alberto Nisman el juez Rodolfo Canicoba Corral y algunos otros funcionarios argentinos hasta llenar el cupo de cinco o seis..
Un segundo nivel de escalada podría ser la definitiva ruptura de relaciones y el cierre de las embajadas que tendría un valor más simbólico que práctico.
En los pasillos de la Asamblea, en Marrakesh, se hablaba nuevamente de la posibilidad de realizar el juicio en un tercer país, algo que ocurrió en el caso del atentado contra el avión de Panam que explotó sobre la localidad escocesa de Lockerbie, pero esa variante que ya había sido barajada a comienzos del Gobierno de Kirchner es inimaginable después de la Alerta Roja.
Diario BAE, Argentina
9-NOV-2007