Marta García Tezanos Pinto trabajó en Canal 7 para los ciclos más prestigiosos. Pero al conocerse su pasado en la SIDE y con Aníbal Gordon, los trabajadores pidieron que la separaran. Su vinculación con Automotores Orletti y los desaparecidos.
Por Walter Goobar
Hasta hace poco, Marta García Tezanos Pinto era una “eficiente y laburadora” productora televisiva de distintos ciclos de Canal 7, como Vida y vuelta, del historiador Felipe Pigna; Los Siete Locos, de Cristina Mucci, y otros conducidos por Héctor Timerman, Mona Moncalvillo y Norma Morandini. Pero una serie de hechos fortuitos revelaron que detrás del apellido de prosapia y de un fallido matrimonio con un importante diplomático, se oculta la historia negra de una ex agente de la SIDE que integró uno de los grupos de tareas más sanguinarios de la dictadura militar.
Según consta en documentos clasificados de las Fuerzas Armadas, la ex agente de inteligencia participó en un secuestro extorsivo y mantuvo estrechos vínculos con la banda de Aníbal Gordon, un siniestro personaje que regenteaba Automotores Orletti, un campo clandestino de exterminio por el que pasaron alrededor de 400 detenidos-desaparecidos, entre los que se cuentan el hijo y la nuera del poeta Juan Gelman. Es probable que en el corto plazo la ex agente sea indagada por la Justicia.
Marta Tezanos Pinto admite haber sido agente de la SIDE entre 1973 y 1977 pero afirma que solo desempeñó “tareas de escritorio” y niega haber cometido “cualquier hecho aberrante”. Sin embargo, un sumario de la justicia militar revela que fue detenida y despedida de la SIDE por haber participado en el secuestro extorsivo de un agente bursátil por el que esperaban cobrar un millón de dólares.
Según su propio relato, Tezanos Pinto ingresó a la SIDE en 1973, por ser amiga de una de las hijas del general Otto Paladino, que la eligió para integrar el grupo de elite que capitaneaba Aníbal Gordon, alias “Jovato”. Este no sólo era el jefe de Tezanos Pinto, sino también el marido de su amiga, la hija de Paladino.
El grupo de la SIDE que llegó a ser conocido como la “brigada panqueque” estableció su cuartel general en Automotores Orletti, un taller mecánico del barrio de Floresta que funcionó como centro de detención clandestino y que sirvió de base operativa para los servicios de inteligencia de países limítrofes que coordinaban la actividad represiva por medio del Plan Cóndor.
La banda de Gordon y Tezanos Pinto está vinculada con en el secuestro y asesinato de los ex legisladores uruguayos Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz. El nombre de la productora figura en la causa uruguaya sobre el tema, así como en la causa 13.445/1999, que está a cargo del juez Rodolfo Canicoba Corral. También es probable que Tezanos Pinto sea llamada a declarar cuando se reabra la causa argentina por el secuestro del hijo, la nuera y el nieto de Juan Gelman, que está a punto de cerrarse en Uruguay.
Un expediente militar muestra cómo operaba la banda y no deja dudas sobre el papel de Tezanos Pinto. El legajo lleva el título “Comando de la IV Brigada de Infantería Aerotransportada” y allí el juez militar teniente coronel Angel Renee Medici investiga “la participación criminal”, “extorsión” y “encubrimiento” en el secuestro del agente de bolsa Pedro León Zavalía, perpetrado el 14 de junio de 1977. Zavalía estuvo secuestrado en una casa operativa de la SIDE, y luego fue trasladado a Córdoba por la banda de Gordon. Pero los secuestradores tuvieron mala suerte. El 22 de julio de 1977, Tezanos Pinto y otro agente de la SIDE, Honorio Martínez Ruiz, fueron detenidos por la Brigada de Investigaciones de San Martín cundo pretendían cobrar un millón de dólares por el rescate de Zavalía en la Panamericana. Gordon, que estaba en otro vehículo, logró escapar.
A los diez días, los agentes de inteligencia atrapados por el secuestro fueron entregados a la SIDE y declarados prescindibles. Pero en realidad pasaron a trabajar en el Batallón 601 de Inteligencia. Distinto fue el caso de Tezanos Pinto, quien fue cesanteada y decidió irse del país. Extrañamente, sus destinos fueron Sudáfrica, Francia y España, tres países donde la SIDE y el 601 tenían destacados agentes. Ella lo explica por su pareja: entonces estaba casada con el diplomático Federico Mirre, actual embajador argentino en Gran Bretaña.
Quienes trabajan con Tezanos Pinto en Canal 7 están en estado de shock. Su historia negra trascendió a partir de notas escritas por este cronista sobre la participación de miembros de la banda de Gordon en un robo al Banco de Crédito Argentino –en 1997–, y de Juan Gelman, en 1998, sobre la desaparición de su hijo, nuera y nieto. Una más reciente de Susana Viau –en Página 12–, sobre el robo de las cajas de seguridad del Banco Nación, también la menciona. Los trabajadores del canal estatal empezaron a atar cabos.
Muchos productores, técnicos y periodistas se niegan a trabajar con Tezanos Pinto y han recolectado firmas de repudio contra la represora. El interventor del canal estatal, Ricardo Palacios, decidió girar el tema a la Secretaría de Derechos Humanos a cargo de Eduardo Luis Duhalde. Por el momento, nadie se decide a apartar a la mujer y la han confinado a las transmisiones de las misas y del juego del Loto.
Algunos colegas sospechan que Tezanos Pinto goza de protección política, atribuida a su ex marido diplomático. Un ejemplo: durante el gobierno de la Alianza fue despedida y recontratada diez horas después. Tezanos Pinto ingresó al canal hace una década, en una época en que varios agentes de inteligencia fueron ubicados en la emisora estatal.
Lo que a sus compañeros también les cuesta explicarse es cómo con su sueldo en el canal, la productora puede vivir en un departamento de Sánchez de Bustamante y Santa Fe, tener campos en el Sur y estar construyendo una importante casa quinta en la zona de Pilar, según el testimonio de quienes trabajan con ella.
Hasta el cierre de esta edición, ni las autoridades del canal –la comunicación fue con Eugenia, secretaria del interventor– ni la propia Tezanos Pinto respondieron a los llamados de Veintitrés para hablar sobre el tema.
En los pasillos de Canal 7, Tezanos Pinto increpa a cada uno de los firmantes del pedido de que se la investigue. Jura y perjura que cuando trabajó en la SIDE era una jovencita que no entendía nada de nada.
–¿Seguís trabajando para la SIDE? –le preguntó uno de sus compañeros. La mujer sólo atinó a responder con un largo silencio.
Pigna y Mucci: “No puede trabajar acá"
“Todo esto nos ha provocado una sensación muy siniestra y desagradable”, señaló Felipe Pigna a esta revista. “Intentamos que el canal hiciera algo y tardó bastante en tomar una resolución hasta que la sacaron de nuestra producción. De todas maneras, sigue estando en el canal. Una persona con ese pasado no puede ser empleada del Estado y estar a cargo de programas culturales”, remarcó el historiador. Por su parte, Cristina Mucci (foto) también se manifestó shockeada y señaló que exigió a la intervención del canal que realice una investigación sobre el tema para saber si la productora es o no inocente. “Es increíble que en un canal del Estado pongan a semejante personaje y más en este momento en el que hay un gobierno como el del presidente Kirchner que constantemente habla de los derechos humanos”, agregó.
Revista Veintitrés
ID nota: 6977
Numero edicion: 384 16/11/2005