Sesenta y siete días antes del atentado a la AMIA aparecieron cruces svasticas acompañadas de la inscripción "Rico 95" en las calles Azcuenaga, Larrea, Pasteur, Viamonte, Tucumán y San Luis, es decir, a pocas cuadras de la AMIA. El 12 de mayo de 1994 en la página 16 el diario La Nación informaba que la policía detuvo en Sarmiento al 2600 a tres militantes del MODIN de 18, 22 y 28 años, mientras pintaban símbolos nazis. Los tres detenidos fueron puestos sa disposición del juez Jorge Urso.
Por Walter Goobar
Sesenta y siete días antes del atentado a la AMIA aparecieron cruces svasticas acompañadas de la inscripción "Rico 95" en las calles Azcuenaga, Larrea, Pasteur, Viamonte, Tucumán y San Luis, es decir, a pocas cuadras de la AMIA. El 12 de mayo de 1994 en la página 16 el diario La Nación informaba que la policía detuvo en Sarmiento al 2600 a tres militantes del MODIN de 18, 22 y 28 años, mientras pintaban símbolos nazis. Los tres detenidos fueron puestos sa disposición del juez Jorge Urso.
El 2 de junio de 1994 (46 días antes del atentado) se realizó en el local de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) un homenaje al ayatola Jomeini al que asistió el embajador de Irán y contó con la adhesión del MODIN y de las agrupaciones "Lucha peronista" y "Reconquista", ligadas a Mohamed Ali Seineldín. Uno de los oradores en el acto fue Rubén Tamborindeguy, director del periódico "Reconquista" que en esos días anunciaba la realización de un homenaje al golpe militar del 4 de junio de 1943 en el que es escuchó una cinta con un mensaje del capitán Breide Obeid y del coronel Seineldín. La publicación de Rabanni, el Mensaje del Islam, que fue distribuido en el acto estuvo dedicado al tema de la Guerra Santa.
El 18 de julio de 1994, a pocos minutos del atentado el experto en explosivos Jorge Pacífico aparece en tres videos conversando con un policía en actitud de evaluar los daños. Pacífico dice que estaba en un bar de Pasteur y Corrientes porque iba a encontrarse con el apoderado macional del MODIN, Enrique Rodríguez Day para comprar un BMW usado que se exhibía por allí. En una conversación telefónica intervenida, Pacífico le pide al ex capitán carapintada y diputado por el MODIN, Emilio Morello que le consiga un "fulminante", es decir, un detonador. Una de las sugestivas amistades de Morello es justamente Moshen Rabbani. Otra casualidad llamativa es que junto a Pacífico estaba Miguel Angel Burgos, otro carapintada que condujo una camioneta Dahiatsu camuflada como ambulancia que estuvo frente al edificio de Pasteur apenas unos minutos después de la explosión. El vehículo utilizado en las campañas electorales del MODIN, se llevó una persona herida que no ha podido ser identificada.
El 5 de septiembre de 1996 a las 23.30 fue asaltado un camión de Juncadelas en Montevideo al 700 donde funciona una sucursal de supermercados COTO. El personal de seguridad del blindado abrió fuego y uno de los asaltantes cayó muerto. Resultó ser Francisco José Iglesias Pérez, (más conocido como Javier Iglesias) de nacionalidad española. Iglesias era el editor de la publicación fascistoide "Lucha Peronista" que reivindicaba a los carapintadas de Seineldín y, además, era colaborador de la revista "El Mensaje del Islam" cuyo editor-propietario es el Agregado Cultural iraní, Moshen Rabbani. Iglesias también mantenía buenos contactos con otra facción carapintada, la de los Albatros de Prefectura exiliados en Uruguay que encabeza Raúl de Sagastizabal. Tanto Iglesias -quien fue traído a la Argentina por el embajador de Iran, Hadi Soleimanpour-, como el grupo de Sagastizabal, que también recibió apoyo iraní, se empeñaron en cimentar la tesis que la voladura de la Embajada de Israel fue un autoatentado. Por otra parte, Carlos Enrique Castillo, alias "El Indio" que se desempeña como asesor de Morello, puede convertirse en el primer sospechoso de haner participado tanto en el atentado a la AMIA como en el de la Embajada de Israel: Entre los heridos del primer atentado figura un Carlos Castillo de la misma edad. Castillo también es amigo de Carlos Telleldín.
Integrante de la Triple y la banda de Anibal Gordon, involucrado en la masacre de Ezeiza y la noche de los lápices, Castillo fue en detenido agosto de 1991 en una vivienda de Av. Maipú al 2.300 de Olivos, a metros de la residencia presidencial, donde la policía encontró dos fusiles FAL, siete cartuchos de dinamita, un cohete autopropulsor, 453 proyectiles 12.70, y equipos electrónicos. El Indio Castillo integraba una banda con la sigla OAS-MRP cuyo jefe era el teniente coronel Arturo González Naya, un oficial carapintada que fue indultado por el presidente Menem. Otros miembros del grupo eran Ruben Escobar y Joaquín Pomponi, dos ex agentes de la SIDE, recientemente detenidos por el famoso robo de los "boqueteros al banco de Crédito Argentino (ver Pistas N 11, 3-10-97).
El 17 de marzo de 1992, a pocos minutos de producirse el atentado contra la Embajada de Israel, Carlos Menem declaraba: "Hubo un atentado en la embajada de Israel...Son los mismos del 3 de diciembre...". Más tarde, flanqueado por los ministros de su Gabinete en una conferencia de prensa en la Casa Rosada, el presidente declaró que los autores podrían ser "nazis y fundamentalistas, de afuera o de adentro", y añadió: "tenemos la seguridad de que se trata de sectores fundamentalistas y no se puede descartar que tengan vinculación con forajidos de adentro". Cuando los periodistas le preguntaron si se refería al encarcelado jefe carapintada Mohamed Ali Seineldín cuando culpó a "alguien que está en prisión", Menem repitió en forma tajante:"Volaron la embajada israelí en Buenos Aires [...] No hago nombres". A pesar de que Menem apuntó a Seineldín, Aldo Rico salió a responder y responsabilizo al gobierno por el atentado por "haber enfrentado a dos colectividades a traves de una burda maniobra política como lo fue el envío de naves al Golfo". Rico tambien acuso al gobierno de "haber creado un clima de intolerancia al caracterizar como extremista al lider de un Movimiento Nacional honrado por el sentimiento de millones de argentinos". Dos días después, Rico anticipó que su movimiento no participaría de la marcha de repudio organizada por instituciones judías y califico de "imprudente" al presidente de la Nacion que involucro "temerariamente al MODIN con el atentado" para enfatizar que "todos sabemos que a Menem le falta la virtud de la prudencia".
LA PISTA IRANI
(Por W.G.)
--"Israel debe desaparecer de la faz de la Tierra", dijo el clerigo iraní Moshen Rabbani durante un acto organizado por los Hermanos Musulmanes en el primer piso de la confitería El Molino el 11 de abril de 1991. Pese a que los Hermanos Musulmanes habían empapelado parte de la Capital Federal con afiches convocando al acto, en el salón no había más de 150 personas, entre ellas siete mujeres vestidas con chador y un nutrido grupo de comerciantes y fabricantes textiles que tienen sus negocios en Once. El salón estaba adornado con inmensos retratos del ayatola Jomeini, una bandera de guerra argentina y una iraní.
"Irán, a través de Hezbollah, está haciendo su aporte a la revolucíón islámica mundial y al pueblo palestino", dijo Rabbani conquistando los aplausos de la plana mayor del cuerpo diplomático iraní, del historiador peronista Fermín Chávez, de Hector Villalón, un extraño personaje del peronismo con estrechos vínculos en los círculos del poder en Teherán y de un grupo de ex-Montoneros que combatieron en el Líbano y desde entonces han mantenido contactos con el chiismo.
Moshen Rabbani es un chiita nacido en Teherán que llegó a Buenos Aires como "refugiado" en 1983 cuando tenía 29 años, pero que ahora admite haber sido enviado al país para convertir argentinos al Islam. Dirige la mezquita al-Tawhid en San Nicolás 674, cuyo título de propiedad está registrado a nombre de la embajada de la República Islámica de Irán. Entre sus fieles se cuenta una decena de argentinos. Rabbani es dueño, además, de dos inmuebles: una casa en la ciudad de Cañuelas y el restaurante "Freud", ubicado frente al hospital Israelita.
"De la actividad de Moshen Rabbani surge la Organización Islámica Argentina, registrada en el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto. Esta organización tiene origen en un grupo de islámicos residentes en Tucumán (Mezquita El Mártir), la cual figura como sede, poseyendo sucursales en Buenos Aires, (mezquita Al Tawhid), en Salta y La Plata", relata un informe reservado de la SIDE. El documento sostiene que "la característica más importante de su actividad es la conversión al Islam de no árabes. Una vez que los conversos demuestran su confiabilidad son becados a Irán por dos años. Cuando regresan enseñan el farsi en las mezquitas o trabajan como empleados en la Embajada, el Centro Cultural o el Departamento Comercial".
"El Ershad (Ministe-rio de Cultura, Informa-ción y Guía Islámi-ca de Irán) –explicó un testigo Eencubierto que declara en la causa- fue creado después de la revolución con el objetivo de exportar la ideología y la cultura islámica a todo el mundo. En sus comienzos establecía en cada país, separada de la embajada, una oficina cultural. Rabbani pertenece al Ershad. Durante años se encubrió a los agentes de inteligencia como agregados culturales".
Respecto a la dotación del Ershad en cada país, el testigo de Galeano dijo que solían ser dos o tres funcionarios, que reclutaban otras dos o tres personas locales, lo más corriente estudiantes, para que colaborasen con ellos haciendo traducciones. En la Argentina -calculó- el Ershad tenía cinco o seis integrantes, además de Rabbani y su esposa, Ricardo Samsuddin Elía, Mohsen Pazoki (hermano del anterior agregado cultural) y dos simpatizantes de la mezquita de Flores.
Ricardo Samsuddin Elia se llama Ricardo H. Elía, y es el director de "El mensaje del Islam", publicación en castellano editada por el Ershad y distribuída en Buenos Aires por la oficina del señor Rabbani. Como director de la publicación figura Samsuddin Elia, que en realidad se llama Ricardo H. Elía, es hijo de un agente de inteligencia de la Marina y mantiene frecuentes contactos con allegados a Seineldín.
El 9 de agosto de 1994, el juez Juan José Galeano pidió la captura de cuatro funcionarios de la Embajada de Irán en Buenos Aires, señalados por el arrepentido Manucher Moatamer como autores intelectuales del ataque a la Embajada de Israel. El juez calificó como sospechosos a tres funcionarios iraníes que estaban en Argentina cuando voló la AMIA, pero la Corte consideró que no había suficientes pruebas para que se presentaran a declarar: el clérigo Moshen Rabbani, y los diplomáticos Gholamreza Zangeneh y Ahmad Reza Asghari.
Gholamreza Zangeneh, que se desempeñaba como Segundo Secretario encargado de la sección comercial y hasta hace poco estuvo a cargo de la embajada, no sólo es diplomático sino que también es comandante de Hezbollah. Ha llevado a cabo acciones armadas en la capital libanesa y se lo conoce como uno de los hombres que preparó varios secuestros de occidentales en Beirut. Zangeneh tiene relaciones privilegiadas con el jeque Subhi Tufayli y fue enviado a la Argentina para organizar la nueva base de operaciones de Hezbollah. Según el testimonio del arrepentido Moatamer, Zangeneh participó el 21 de marzo de 1994 en una reunión que se llevó a cabo en Teherán en la que se decidió el ataque contra la AMIA.
Ahmad Reza Ashgari, que cumplió funciones como Tercer Secretario desde el 11 de julio de 1991, se encontraba en Buenos Aires durante el atentado a la Embajada de Israel, pero se fue de la Argentina una semana después del ataque contra la AMIA aunque su misión diplomática concluía recién en octubre. Ashgari, quien hasta 1984 formaba parte de la Séptima División de los Guardias de la Revolución, no fue el único iraní que partió de manera precipitada a Teherán:
Sobre un total de 93 estudiantes iraníes -que en su mayoría cursaban las carreras de Ciencias Económicas y Medicina en la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA)-, cuatro desaparecieron inexplicablemente después del atentado consumado con un cohe-bomba que partió del estacionamiento ubicado precisamente frente a esas facultades.
LA PLANIFICACION DE UN ATENTADO
(Por W.G.) La División de Operaciones Especiales del Aparato Especial de Seguridad de Hezbollah está compuesta por un número no mayor de 25 "especialistas", todos chiitas que recibieron un prolongado entrenamiento en Irán. De acuerdo con los procedimientos de la organización, un ataque requiere la coordinación de distintos aspectos:
a) "El agente residente" o la célula local que, desde mucho tiempo antes, se ocupa de preparar los depósitos de armas y explosivos; consigue un taller mecánico o un galpón para armar el coche-bomba; realiza el reconocimiento preliminar del blanco; y provee la información de inteligencia que permita planificar la operación.
b) "El supervisor", quien viaja al lugar en el momento apropiado, examina el blanco en detalle, efectúa un estudio de factibilidad y luego retorna a la base de operaciones para consultar con la comandancia.
c) "El intermediario", generalmente es un cuadro con cierto rango, cuya sola tarea puede ser la provisión del vehículo o el traslado de los explosivos desde los escondites -controlados por el agente residente- hasta las manos del supervisor. En algunos casos, el intermediario no conoce al residente; simplemente, recoge los materiales en un lugar de entrega predeterminado. Su función termina en el instante en que se concreta el traspaso.
d) "El comando operativo". Este grupo esta integrado generalmente por un especialista en demolición, un mecánico que arma el coche, y un experto en electrónica y comunicación- y un jefe, cuya misión es resolver todos los detalles prácticos de la operación. Ninguno de ellos conoce al agente residente ni tampoco el escondite de las armas y la infraestructura local. El "supervisor" tampoco conoce al residente; su único contacto se realiza a través del "intermediario".
e) "El piloto", suicida o no. Si la operación falla y el piloto es detenido, la policía no podría llegar al residente, ni al arsenal y menos aún a los autores intelectuales. Si la operación se desarrolla sin tropiezos y el equipo se retira de acuerdo con planes preestablecidos, el supervisor debe depositar el arsenal sobrante en otro escondite, de donde será recuperado por el residente y escondido para su uso futuro.
FECHA:02-DIC-1997