El sermóm del reverendo Moon

El reverendo Sun Myung Moon es una cruza de monje y soldado que ha desplegado con éxito "la estrategia de la araña" y ha tejido una enorme red que utiliza habilmente para incorporar a las elites de la prensa y del mundo político a su proyecto universal.

Por Walter Goobar
"Yo soy el cerebro de ustedes. dentro de un tiempo mis palabras se ban a convertir en ley, y los presidentes y reyes de la Tierra se van a postrar a mis pies", vaticinó el reverendo Sun Myung Moon a sus adeptos en un discurso pronunciado en 1975. Desde entonces esta cruza de monje y soldado ha desplegado con éxito "la estrategia de la araña" y ha tejido una enorme red que utiliza habilmente para incorporar a las elites de la prensa y del mundo político a su proyecto universal. En sus archivos se encuentran centenares de poderosos de todo el mundo. Hace poco más de un año hizo realidad su vaticinio cuando consiguió reclutar al ex-presidente George Bush quien junto con el ex-presidente del Uruguay Luis Alberto Lacalle han oficiado de introductores del reverendo coreano ante Carlos Saúl Menem. Anoche subsistía la incógnita con respecto a si el presidente - deshoyendo los consejos de la Cancillería- asistirá la presentación en sociedad de la secta y su nuevo diario que se llevará a cabo esta noche en el hotel Sheraton.
"El Mesias debe ser el más rico", dijo el reverendo en cierta ocasion. "El es el unico calificado para dominar las cosas materiales y, hasta que no sea asi, ni Dios ni el Mesias podran ser felices". Como en todas las corporaciones trasnacionales, no hay país occidental donde la secta Moon no tenga negocios o intereses. Aunque sus representantes nacionales ostentan el título de "Kaicho", en realidad cumplen funciones similares a los directivos de cualquier companía. En junio pasado el representante de la filial japonesa de la secta Moon fue reemplazado en su cargo. El directivo saliente y otros dos miembros de la cúpula de la secta recibieron un nuevo destino en la empresa trasnacional: América del Sur. Según especialistas en el tema, estos traslados anticiparon la intención del reverendo Moon de convertir a los países del Mercosur en su nueva base de operaciones para negocios terrenales y espirituales.
Los tres directivos trasladados a Sudamérica son: Hideo Oyamada, conocido por su capacidad para establecer contactos internacionales; Motoo Yoshida, ex-titular de "Mundo Feliz", considerado la punta de lanza del marketing espiritual de la Iglesia de Unificación; y Koryo Ota, Presidente de la Junta y Presidente del grupo anticomunista "Kokusai Shokyo Rengo", una de las organizaciones que formalmente actúa separadamente de la Iglesia de Unificación. Existen muchas hipótesis sobre esta restructuración, pero según creyentes bien informados, la teoría más probable es que Moon tarde o temprano va a desembarcar definitivamente en el Mercosur.
Tras el derrumbe de la Unión Soviética los moonies han proclamado que "su triunfo sobre el comunismo", y han comenzado a contemplar el Tercer Mundo, particularmente Sudamérica como el nuevo escenario para su cruzada religiosa y económica. Tras un período de preparación que implicó inversiones de cientos de millones de dólares para la compra de extensas propiedades en Brasil y Paraguay, hoteles, bancos y periódicos en Uruguay y un centenar de comunidades agrícolas en la Mesopotamia argentina.
Los moonies han estado bastante ocupados en penetrar en la escena política por medio del reclutamiento de padrinos. El 23 de mayo de 1995, el presidente argentino Carlos Menem recibió en audiencia privada a Moon, que llegaba por tercera vez al país. Todas las voces oficiales negaron durante ocho días que hubiese habido entrevista. Sin embargo, después de que el representante de la secta en Buenos Aires advirtió que tenia fotos, Menem tuvo que admitirlo: "Me pidió el doctor Lacalle, ex presidente de Uruguay, en nombre de Moon, que lo recibiera. Quería conocerme personalmente y transmitirme algún tipo de inquietud. Me felicitó por las elecciones, me dio el pesame por la muerte de mi hijo y me anunció una serie de inversiones".
Como hombre de empresa, Moon ha edificado un imperio que abarca desde negocios de armamento (Tong Il Industries) a zapatos, pasando por productos farmacéuticos (especialidad: comercializacion del gingseng, metalurgicos, pesqueros o periodísticos como el Washington Times en EEUU, Noticias del Mundo en Uruguay y ahora Tiempos del Mundo en la Argentina. Un escandalo con el Diplomat National Bank sepuló sus sueños de convertirse también en banquero.
La secta Moon inicio sus actividades en Argentina a fines de 1979, en plena dictadura militar, y conquistó la adhesión del expresidente Arturo Frondizi y los generales Genaro Díaz Bessone, Osiris Villegas y Miguel Mallea Gil. En estos 17 años se calcula que Moon ha logrado captar a unos 15.000 argentinos, pero solo 500 son miembros con dedicación exclusiva.
En Argentina la secta participa en industrias agropecuarias, pesqueras, medicinales, alimentarias, en astilleros y en empresas vinculadas a tecnología y comunicación. La secta controla también dos poderosas organizaciones, la Asociación Pro Unidad Latinoamericana (AULA) y CAUSA, encargadas de reunir en seminarios y conferencias a ex jefes de Estado, candidatos a serlo, jefes militares y dirigentes civiles. Causa Internacional creo en 1984 el Consejo Internacional de Seguridad, que en 1986 era dirigido por el ex-secretario de la OTAN Joseph Luns. El lider ultraderechista frances Le Pen reconocio en 1988 que Moon financiaba su campaña.
El colombiano Antonio Betancourt, secretario general de AULA, resume: "Se trata de la construcción del reino de los cielos en la tierra".  En una asamblea de Aula en Madrid en 1986 el segundo de Moon, coronel Bo Hi Pak explicó así el interés de la iglesia de Moon por Iberoamérica: "Me gusta el tango". Entre los participantes en reuniones de Aula figuran el líder de la organización terrorista ultra OAS, Jacques Soustelle, el expresidente francés Giscard d'Estaing y los escritores Mario Vargas Llosa y Louis Pawels.
Hasta ahora las principales inversiones en el cono sur se concentraban en Uruguay, donde la secta es propietaria de los principales hoteles del país, un banco, la mayor imprenta y un periódico. La trama uruguaya ocupa 10 páginas del libro "El imperio Moon" de Jean Francois Boyer. En ese sentido el expresidente de Uruguay Luis Alberto Lacalle y su sucesor Julio María Sanguneti son considerados dos puntales de la Iglesia de Unificación. En papeles de circulación interna del grupo hay referencias de que el reverendo Moon habría estado viviendo en una carpa en un territorio inexplorado "para crear el Reino de Dios". Esta referencia implicaría que los tres cuadros moonistas han sido enviados a estas latitudes "para terminar de preparar el terreno".
Entre 1976 y 1984, la rama japonesa de la secta transfirió 800 millones de dólares a Estados Unidos, sin embargo en 1984 Moon fue a la cárcel en los EEUU por evasión impositiva y esa mancha resultó un obstáculo infranqueable en sus planes de penetrar en Japón. Aún no está claro si Moon ha encontrado o no el Reino de Dios, pero sobre lo que no vaben dudas es que teniendo en cuenta la moral impositiva, es seguro que en la Argentina, Moon encontrará un paraíso. Cuanto menos fiscal.
A las 4:30 de la madrugada en un rincón remoto de Brasil una campana llama a rezar. Pronto dos docenas de personas jóvenes vestidos con jeans y remeras se reúne para cantar su devoción al "Padre Verdadero" .La imagen que ellos veneran no es la de Jesucristo, sino la de un coreano septuagenario, el reverendo Sun Myung Moon, apóstol de un controvertido ministerio que lo ha conducido a la prisión en los EE.UU.. Pero ahora el reverendo está embarcado en un nuevo y ambicioso proyecto: la conquista del Mercosur.
Ademas de invertir en la compra de escuelas y universidades, uno de los planes de Moon consiste en crear la Universidad de las Tres Fronteras en la localiad paraguaya de Ciudad del Este que desde el punto de vista económico es el puerto libre más importante del mundo, pero que además ha concentrado la atención por la proliferación de delitos como el trafico de armas, lavado de dinero, trata de blancas y terrorismo. En la misma zona, el grupo instalará una fábrica procesadora de edulcorantes producidos en base a una planta guarani.
Durante una conferencia organizada en Asunción por la Federación de Familia para la Paz Mundial, la doctora Hak Ja Han Moon anunció la instalación de una planta ensambladora de vehículos Mekong, cuyas partes fabrica la secta en Vietnam. Moon es un asiduo visitante del Paraguay y comparte su pasión por la pesca con influyentes paraguayos como el general Andrés Rodríguez. También fue recibido por el actual presidente Juan Carlos Wasmosy.
En Brasil, un país donde su Iglesia de Unificación tiene pocos adherentes, la secta Moon ha invertido 100 millónes de dólares en la construcción de un centro religioso y una granja agrícola piloto para albergar a sus futuros creyentes. Otro proyecto contempla la construcción de un hotel cinco estrellas en el Pantanal, la región de frontera entre Brasil y Bolivia.
El selecto grupo de discípulos de Moon que reúne al amanecer en una zona cercana a la Triple Frontera entre Brasil, Paraguay y Argentina, proviene de diferentes países y constituye la vanguardia de un grupo que planea multiplicarse por millares. Su misión, -dice con toda seriedad uno de los discípulos de Moon-, "consiste en reconstruir el Jardín del Edén, un paraíso sobre la Tierra".
Los moonies han comprado 16.000 hectáreas de tierra a diversos propietarios, y el plan consiste en expandirse hasta comprar otras 50.000. El centro neurálgico de operaciones de la Iglesia es la Estancia de Nueva Esperanza, donde se alojan 300 devotos trabajadores que realizan tareas de construcción.
Con un flujo de dinero aparentemente interminable que proviene de millares de empresas grandes y pequeñas emplazadas en casi todo el mundo , los líderes de la Iglesia de Unificación han comprado una dosis de buena voluntad en los municipios locales. En agosto, la secta realizó un banquete para 3.000 comensales al que asistieron una docena de alcaldes y funcionarios del gobierno brasileño. Moon y su esposa ("la Madre Verdadera" ) donaron 28 ambulancias a ciudades y pueblos en la región de la Nueva Estancia de Esperanza. Otras personas influyentes fueron invitadas a pasar unos días --con los pasajes y todos los gastos pagos- al Victoria Plaza de Montevideo, un hotel de cinco estrellas que maneja la Iglesia de Unificación regentea en Uruguay.
Pero la buena voluntad no es universal. Las Iglesias católica y protestante no ocultan sus temores ante lo que consideran una "operación de captación de fieles". Pocos días después del banquete organizado por la secta, el arzobispo de Campo Grande Vitorio Pavanello, hizo un llamado público pìdiendo la prohibición de la secta. Tanto católicos como protestantes acusan a Moon de herejías doctrinales porque afirma que María no era virgen, y porque sostiene que él y su esposa, son "los Padres Verdaderos". Respeta a Jesus porque vino a salvar el mundo, pero fracasó al vincularse con los pobres y las prostitutas: por eso Dios envió un nuevo Mesias rico (el propio Moon) para luchar contra la encarnación de Satanás que es el comunismo.
Los líderes de la secta han tratado de suavizar la oposición con dádivas generosas. Los curas párrocos no se han dejado impresionar por la opulencia de la secta:"Moon explota la pobreza" dice el padre Roosevelt. "El trata de conseguir fieles mediante sus estómagos".
Por ahora Moon ha atraído solo a unos 3.000 fieles en Brasil, lo cual es poco en una población de 160 millónes. Pero sus planes consisten -en primer término- en ampliar la importancia económica de su iglesia, y sólo en una segunda etapa acrecentar la influencia religiosa.
En 1993 el Registro de Entidades Religiosas de Alemania denegó la inscripcion de la organizacion, argumentando que no acreditaba ser iglesia, confesión o comunidad. En 1995 Moon planeaba concluir una gira internacional en Francfort, pero las autoridades alemanas renovaron la prohibicion de entrada que pesaba sobre el desde los anos 80, por "atentar contra el orden publico".
En esa misma oportunidad, los deseos de Moon de iniciar su periplo europeo en el Reino Unido se vieron frustrados cuando el ministro del Interior, Michael Howard, le nego la entrada al pais. Howard baso su decision en los danos que para el bienestar del pueblo britanico podrian derivarse de esa presencia. Sin embargo, la prohibicion del Ministerio del Interior britanico fue revocada dias despues por los jueces, que la consideraron tecnicamente ilegal. Los seguidores britanicos son apenas 700, pero la organizacion, registrada como "de caridad", cumple los requisitos. Pese al triunfo moral, Moon Paginaprefirio no volver a solicitar visado.
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FECHA: 22-NOV-1996